La formación de cristales (bruleado) se considera un defecto en muchos dulces, pero no cuando se trata de este postre: la crème brûlée. La parte quebradiza, esa capa del almíbar que cubre una natilla suave de vainilla, es una verdadera obsesión que mezcla texturas y sabores. Los chefs intentan rendirle tributo con distintas versiones.
¿Quién ganó en el juego del azúcar?
Dulce Patria
Martha Ortiz se luce con este cremoso bruleado con base de mamey. Lo acompaña con jalea de pétalos de rosa y hoja de oro.
Dirección: Anatole France 100, Polanco, CDMX.
Gloutonnerie
La espaciosa casa de Polanco tiene en su haber uno especial con base de café. Lo mejor es que va aderezado con fresa, zarzamora y un toque de chocolate.
Dirección: Campos Elíseos 142, Polanco, CDMX.
Ryoshi
Aquí reinventan el clásico bruleado y lo llevan a otro nivel. Se trata de un pastel crujiente que encima lleva nuez, cajeta, helado de vainilla y plátano con mascabado que se flamea en la mesa.
Dirección: Av. Pdte. Masaryk 111, Polanco, CDMX.
Machi Machi
La casa de bebidas en Corea del Sur tiene dos drinks que llevan topping bruleado de espuma. El té verde con leche o té negro con bolitas de tapioca.
Dirección: 25 Dosan-daero 11-gil, Sinsadong, Gangnam-gu, Seoul.
Eloise
Para los de paladar salado, este bruleado hecho de foie gras va con un garnish de arúgula y se adereza con una vinagreta de maracuyá y pasas.
Dirección: Av. Revolución 1521, San Ángel, CDMX.
ABCV
Este sitio, obra de Jean-Georges Vongerichten, tiene en su menú un matcha brûlée 100% sustentable y orgánico. Lleva kuzu, leche de coco, semillas de vainilla y agar agar.
Dirección: 38 E 19th Street, Nueva York.
