La uchuva es una fruta de los Andes, su ligera acidez es el complemento perfecto de una panna cotta. Si no la consigues puedes reemplazarla con mora azul o frambuesa para esta receta que nos compartieron Mercedes Bernal y Rodney Cusic del restaurante Meroma en la CDMX.
Prepara con antelación: puedes adelantar el paso de la compota y tenerla refrigerada al menos dos días antes.
- 1 taza de crema para batir
- ¼ taza de yogurt griego
- 2 cucharadas de miel de abeja
- 1 cucharada de azúcar blanca
- 1 paquete de grenetina en polvo (7 gm aprox) disueltos en taza de agua fría.
- 2 tazones depara
- 2 tazas de uchuva (puedes reemplazar por moras azules, zarzamoras o frambuesas)
- ¼ taza azúcar
- ¼ taza miel
- 1 pizca sal
- 2 cdas vinagre balsámico (entre más añejo mejor)
Ingredientes
- Prepara la panna cotta. En una olla mediana mezcla a fuego lento el yogurt, la miel, el azúcar y la crema. Deja que la mezcla hierva por un minuto y agrega la grenetina hidratada y revuelve hasta incorporar, puedes utilizar una batidora de mano para este paso.
- Retira la mezcla del fuego y pásala por una coladera fina en los moldes para servir la panna cotta. Refrigera por lo menos cuatro horas o, de preferencia, la noche anterior.
- Prepara la compota. En un coludo chico a fuego lento hierve la fruta, el azúcar, la miel y una pizca de sal hasta obtener una consistencia parecida a la mermelada, aproximadamente 20 minutos. Retira del fuego y deja reposar durante 15 minutos. Agrega el aceite balsámico y guarda en el refrigerador.
- Para servir, vierte un poco de la compota sobre la panna cotta.