El tema de la sal es tan amplio como el de los condimentos. Existe una gran variedad de estilos y cada una sirve para enaltecer ciertos elementos o crear texturas específicas. Esta sustancia cristalizada, inodora, de sabor inconfundible y penetrante se utiliza como condimento, para mejorar el sabor de los alimentos, y también como agente conservador (enlatados, salazones, pescados, charcutería, etcétera).
La sal es indispensable para el organismo, aunque si se consume de forma excesiva puede ser contraproducente y llega a ocasionar graves problemas de salud, pues aumenta la tensión arterial y contribuye al sobrepeso, enfermedades que pueden afectar al sistema cardiovascular, de acuerdo a información del IMSS. El consumo de sal recomendado es de 5 gramos al día, sin embargo, debido al consumo de alimentos procesados, una persona puede llegar a consumir hasta 20 gramos por día.
Si creías que la sal que encuentras en el supermercado es la única que existe, lamentamos decirte que no hay nada más lejos de la realidad. La sal se encuentra en la naturaleza y es muy abundante. A continuación te presentamos los principales estilos de sal y te decimos cómo puedes usarla en la cocina.
Síguenos en Google News para que no te pierdas las novedades
¿De dónde viene la sal?
La sal se puede obtener de diferentes fuentes: salinas marinas, manantiales, minas y procesos industrializados. El sistema salino es sencillo: el agua de mar se conduce por una red de canales hasta unas plataformas horizontales donde se deja evaporar ya sea por medio del sol o del aire hasta formas terrazos de sal.
La sal de manantial se obtiene al introducir lodo salino en recipientes sobre el fuego, generalmente este método se utiliza cuando el clima no permite la evaporación natural. La sal de minas y salares se obtiene al extraer el mineral y pulverizarlo, o bien al extraer lodo-salmuera y luego evaporarlo. Los evaporadores al vacío son el método industrial actual más conocido para obtener sal, estos constan de algunos depósitos cilíndricos donde hay una cámara de vapor que se sumerge en la salmuera que se va a evaporar. Los granos de sal obtenidos por este método son muy regulares y finos.
También puedes leer: Guía básica de equivalencias de cocina (para salir de apuros)
Tipos de sal y su uso
Como en muchos productos, el nombre puede aludir a una estrategia de marketing, o bien destacar su procedencia o alguna característica particular. Lo más importante al elegir el tipo de sal será saber para qué va a utilizarse, con esto en mente será más fácil elegir la ideal.
- Sal de cocina: Sirve para salar la comida durante la cocción. Normalmente se conserva en una caja con tapa para preservar la humedad.
- Sal fina o de mesa: Es la sal refinada del súper. Se coloca en un salero, se usa para sazonar y, según el Pequeño Gastronomique en Español, se usan algunos aditivos para mantenerla seca y que no se humedezca mucho.
- Sal yodada: Es una sal fina con yoduro de sodio. La Unicef recomienda que las personas con carencia de yodo la consuman.
- Sal sin sodio o baja en sodio: Sustituye el cloruro de sodio por cloruro de potasio, se recomienda para las personas con hipertensión o alguna enfermedad cardiovascular. Se usa para sazonar los platillos regulares.
- Sal gruesa: Se utiliza para ciertas preparaciones como para crear una costra sobre algún corte de carne, para cocer alguna ave o para hacer salmuera, por ejemplo el salmón gravlax.
- Sal especiada: Esta sal está mezclada con pimienta molida y diversas especias. Es ideal para condimentar carne o algunos guisados.
- Flor de sal: Es sal muy final que se da como resultado de la primera cristalización. Se recoge manualmente y es muy apreciada en la alta cocina gracias a su alta concentración de yodo natural y textura.
También puedes leer: Las salsas que necesitas en tu alacena
- Sal de hickory: Es una mezcla de sal marina y de serrín de hickory ahumado, pulverizado. Se emplea en la cocina de barbacoa por su sabor ahumado.
- Sal de Maldon: Se produce en Inglaterra, es una marca registrada por la Maldon Salt Company. Proviene de la salmuera evaporada del estuario del río Blackwate. Es muy apreciada por su textura.
- Sal negra de Hawái: Se recoge de manera artesanal en la isla de Molokai. Se mezcla con carbón activado y se obtiene una sal de color oscuro, con una textura gruesa y crunchy. Da un sabor ahumado que combina bien con sabores a las brasas.
- Sal kosher: es una sal pura (sin añadidos químicos), se emplea tradicionalmente por los judíos. Se usa en la cocina como sal de mesa.
- Sal rosa del Himalaya: Es sal mineral color rosado originaria de las montañas del Himalaya. Puede ir desde el grano más fino para usar como sal de mesa, hasta una versión más gruesa para usar con molino o como decoración.