- 1 1/4 taza de buttermilk
- 1 paquete individual de levadura instantánea
- 1 huevo
- 2 yemas
- 1 vaina de vainilla (semillas)
- 1 kilo de harina de trigo cernida
- 3/4 de taza de azúcar morena
- 1 cucharadita de sal
- 2 tazas de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- Para el relleno:
- 3/4 de taza de mantequilla clarificada
- 2 cucharadas de canela en polvo
- 3/4 de azúcar morena
- 1 taza de nuez pecada triturada
- Para el glaseado:
- 4 tazas de azúcar glas cernida
- 2 cucharadas de semillas de vainilla
- 2 cucharadas de jugo de limón amarillo
- 2 cucharadas de agua caliente
Ingredientes
- En una batidora grande con gancho, mezcla el buttemilk, la levadura, los huevos y vainilla. Poco a poco, incorpora la harina, el azúcar, la sal y la mantequilla. Mezcla hasta que se forme una masa uniforme. Debe ser un poco elástica pero no chiclosa.
- Deja reposar la masa en un lugar templado por 1 hora, hasta que doble su tamaño.
- Para el relleno: mezcla la mantequilla, la canela, el azúcar y la nuez picada en un bowl. Reserva.
- Estira la masa en una superficie plana en un rectángulo de 50 cm por 80 cm. Cubre todo muy bien con el relleno y enrolla de bajo hacía arriba.
- Una vez enrollado todo, corta en discos de un grosor de 4 cm apróx. Coloca en una carola alta con papel encerado y hornea por 45 minutos en un horno precalentado a 180 °C. *Aquí puedes batir una yema de huevo y barnizar todo para que se doren un poco más. Pero es opcional.
- Para el glaseado, mezcla en un bowl pequeño el azúcar, vainilla, jugo de limón y agua y con un globo pastelero revuelve hasta que no tenga grumos.
- Una vez que saques los bollos del horno deja enfriar unos 10 minutos y baña con el glaseado.