Cómo hacer leche de almendra, avena, nuez y coco en tres pasos

Es mucho más fácil de hacer de lo que imaginarías
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Las leches vegetales se han vuelto una alternativa deliciosa y saludable para quienes prefieren abstenerse de los lácteos. Pero es todavía mejor cuando la haces en casa; no hay desperdicio, puedes endulzarla a tu gusto y no contiene químicos adicionales. Aprovecha esta cuarentena para hacer leche de almendra, de coco, de nuez pecana y de avena. Acá te decimos cómo.

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¿Qué necesitas?

El procedimiento para hacer leche vegetal es muy sencillo y es el mismo proceso para todas. Puedes experimentar con amaranto, arroz o nueces de la India. Vas a necesitar un manto de cielo o nut bags y puedes utilizar los sólidos restantes como harina para hornear tu pastel favorito.

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Leche de avena

Una noche antes, remoja media taza de avena. Al día siguiente tira el agua e incorpora 3 tazas de agua muy fría (si lo haces con agua caliente tendrá una textura gomosa). Licúa la avena durante tres rondas de 20 segundos. Con ayuda de un manto de cielo, exprime el líquido en un recipiente. Puedes endulzarla con, dátil, fruta del monje o miel de abeja.

Leche de coco

Para obtener leche de coco no necesitas remojar una noche antes. Solo debes incorporar 2 tazas de coco rallado con 3 tazas de agua tibia, una pizca de sal, canela y vainilla al gusto en la licuadora. Licúa en tres rondas de 20 segundos y filtra la mezcla con el manto de cielo. Coloca en un frasco de cristal hermético para que te dure más tiempo.

Leche de nuez pecana

La nuez es alta en ácidos grasos, omega 3, magnesio y fósforo. Para esta leche debes remojar una taza de nuez pecana con cáscara una noche antes. Desecha esa agua y reemplázala por 3 tazas de agua, licúa tres veces por 20 segundos, filtra con un manto de cielo. Puedes endulzarla con miel de maple y no olvides agregar una pizca de sal para intensificar los sabores.

Leche de almendra

Coloca 1 taza de almendras (previamente remojadas por 12 horas) en el triturador/ licuadora con 3 tazas de agua potable. Añade una pizca de sal, canela al gusto y unas gotitas de vainilla. Endulza al gusto y almacena en un frasco de cristal con tapa hermética.