
La riqueza y variedad cultural del Medio Oriente se sienta a la mesa en el pequeño local de Gulí Hagadol que se jacta de ser el único en la Ciudad de México donde sirven platillos de Irak, Líbano, Yemen, Egipto y Marruecos para compartir al centro de la mesa.También te puede interesar: Nuevos restaurantes | El Roma BistrotLa selección de aperitivos es la mejor forma de abrir boca: una selección que incluye los clásicos como el hummus, el baba ghanoush o la ensalada israelí y otros, mucho más interesantes, como el mango encurtido y ligeramente picante (que bien podría competir con los mangos del parque), el mama ganoush (un baba ganoush de betabel) y la ensalada de col agridulce que ayuda a dejar de lado las fuertes especias de algunos de sus compañeros de mesa.
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La comida aquí tiene un toque familiar y casero, probablemente debido a que el concepto no fue creado por un cocinero profesional sino por uno amateur, el exmilitar israelí Gulí Dabas, apasionado de la gastronomía y las historias que la envuelven. Sus abuelos se dedicaban a elaborar y vender miel de dátil con la misma receta que ahora utiliza en el restaurante. La puedes probar en su postre manjar del desierto que lleva helado de vainilla, tahine y halva (un dulce elaborado con pasta de sémola). Después de la comilona, un café turco con ankar será el digestivo que te ayudará a seguir con tu día.