Frijoles ancestrales, ¿por qué es importante proteger estas semillas?

Desde tiempos precolombinos hasta hoy, representan una de nuestras principales fuentes de alimento
frijoles ancestrales

En el mundo se conocen 150 especies y en México existen alrededor de 70 variedades. Los frijoles se agrupan de acuerdo con su color: negros, amarillos, blancos, morados, bayos, pintos y moteados. 

También te puede interesar: Acaban de aprobar una ley que fomenta el cultivo y la diversidad del maíz

Las culturas mesoamericanas basaron su alimentación principalmente en los frijoles y en el maíz. Este no sólo suministra proteínas y carbohidratos, tiene cantidades importantes de vitaminas (niacina, riboflavina, ácido fólico y tiamina) y minerales (calcio y hierro). Esta pequeña semilla es tan noble que se puede desarrollar en distintos tipos de suelo y clima y es considerada como un producto con gran relevancia social transgeneracional, como herencia entre campesinos. Pero no hay un sólo tipo de frijol. 

Lamentablemente su diversidad está desapareciendo debido a que los productores dejan de sembrar las variedades exóticas por productos mejor pagados. Sin embargo hay algunas iniciativas que buscan promover la conservación de los frijoles criollos.

¿Cómo protegerlos?

Actualmente existen marcas como La Comandanta, que se alían con productores rurales de semillas criollas que no cuentan con los medios para distribuirlas. Su objetivo es reactivar el campo tradicional mexicano, así que la mejor manera de ayudar a la diversidad es que todos las consumamos.

También te puede interesar: 5 preparaciones que demuestran que a los mexicanos nos encantan los frijoles

El Fondo Mundial para la Naturaleza (wwf) México, lanzó una campaña para promover la conservación de ingredientes de nuestra gastronomía que están amenazados, como los frijoles. Para más información puedes consultar su página.