El pumpkin latte o café de calabaza se ha convertido en una de las bebidas insignias de la temporada de otoño. Su aroma y sabor a calabaza con un ligero toque especiado inmediatamente nos transmiten esa sensación reconfortante para disfrutar los días templados en los que las hojas de los árboles comienzan a caer.
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La receta es obra de la famosa cadena de bebidas Starbucks. Pero para que no tengas que esperar hasta que esté disponible en tiendas, siempre es buena idea preparar tu propia versión casera de la bebida, aquí te decimos cómo lograrlo.
El pumpkin latte es una bebida que mezcla café y canela, con un delicado sabor a calabaza, un toque de nuez moscada y especias, coronado con crema batida. La preparación es realmente sencilla, la clave está en preparar el puré de calabaza, así que te sugerimos optar por uno natural, ya sea que lo prepares tú mismo o lo compres. En cuanto a las especias, lo importante es no excederte con las medidas, así lograrás que complementen la bebida en general y no opaquen el sabor del café o la calabaza.
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Muchas personas han creado diferentes variaciones del pumpkin latte, pero la receta base requiere los mismos ingredientes que son: puré de calabaza, canela, jengibre, nuez moscada, café y clavo. Esta es la clave para que consigas una bebida aromática y con un buen sabor.
La receta original no requiere un tipo de endulzante o edulcorante, porque la calabaza en sí misma ya aporta dulzor y la crema batida también. Pero, si al probarlo te apetece darle un toque más dulce, puedes usar un poco de azúcar mascabado o miel natural.
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