El sticky rice dulce es uno de los mejores postres asiáticos que hay, es uno de nuestros favoritos. Existen muchas versiones y formas de hacerlo, se consume en países como Tailandia, Laos y Vietnam, sólo por mencionar algunos.
En la escuela de cocina aprendí a hacer una versión vietnamita de un sticky rice con coco. Pero con el tiempo y algunas modificaciones de ingredientes y utensilios, terminé con una versión simplificada y más accesible. Aquí te digo cómo lo puedes hacer en casa con pocos elementos.
- 1 taza de arroz glutinoso
- 1 taza de agua
- 4 cucharadas de leche de coco dulce
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 taza de coco tostado y deshidratado
- 2 cucharaditas de azúcar
- Fruta de tu elección picada: mango, piña, durazno, fresas o plátano
- Ajonjolí garapiñado al gusto
Ingredientes
- Remoja el arroz desde una noche antes con agua potable. Al día sigiuente, enjuaga el arroz sobre el chorro de agua fría y cuela. Coloca en una olla pequeña y cubre con el agua, la leche de coco y la sal. Deja cocer por dos minutos a fuego medio moviendo los granos de abajo con una pala. Una vez que la mayoría del líquido se haya absorbido, baja el fuego y deja cocer por 15-20 minutos, cubierto con una tapa. Cuando el arroz esté cocido, apaga en fuego y deja reposar por 10 minutos.
- Con ayuda de un tenedor, esponja el arroz y transfiere a un bowl. Añade el coco rallado y el azúcar, mezcla muy bien. Sirve en platos individuales y cubre con la fruta picada de tu preferencia y el ajonjolí garapiñado.