
Durante esta temporada es probable que hayas considerado comprar más de lo habitual y está bien para evitar salir de casa con frecuencia. Aunque no hay que hacer compras de pánico, sobre todo con la comida fresca que puede echarse a perder, lo recomendable es que que tomes precauciones y compres víveres para las siguientes dos semanas.
Congelar las verduras, y otros alimentos, es una alternativa para que, en general, duren más tiempo. Pero hay un paso extra que probablemente no sabías y puede hacer toda la diferencia: el blanqueado o escaldado. ¿De qué se trata? Esta técnica culinaria consiste en hervir o cocinar al vapor las verduras durante un breve periodo de tiempo para cocerlas parcialmente.
Aunque las verduras que solo se congelan son seguras para comer, estas pueden adquirir colores, texturas y sabores un tanto extraños. Por ejemplo, si alguna vez has congelado un manojo de espinacas crudas, te habrás dado cuenta que se vuelven oscuras y pegajosas. Así que el blanqueado es un paso esencial antes de congelar muchas verduras como el brócoli, verduras de hoja verde, ejotes y espárragos.
El blanqueado detiene la actividad enzimática que descompone las verduras. Estas enzimas pueden sobrevivir a temperaturas de congelación y continuar el proceso de descomposición a pesar de que la comida está congelada, pero el tratamiento previo de los alimentos con agua hirviendo o vapor mata las enzimas.
Cómo blanquear tus verduras
1. Pon a hervir el agua mientras limpias y cortas las verduras.
2. Coloca las verduras cortadas en la olla de agua hirviendo o aplica baño María. Cocina por la cantidad de minutos apropiados para cada verdura (la mayoría no deben excederse de los 6-8 minutos).
3. Después de que la verdura haya sido blanqueada por el tiempo recomendado, drena las verduras e inmediatamente sumérgelas en agua helada o pasa agua fría sobre ellas, el punto es enfriarlas lo más rápido posible para que no continúen cocinándose.
4. Después, escúrrelas bien. Con las hojas verdes, exprime la mayor cantidad de agua posible para lograr congelados de calidad.
5. Coloca las verduras blanqueadas en bolsas o recipientes y guárdalas en el congelador.
Tiempos de escaldado para vegetales
Corazones de alcachofa: 6 minutos
Espárragos: de 2 a 4 minutos dependiendo del grosor del tallo
Frijoles: 3 minutos
Brócoli (cortado en trozos de 2.5 cm): 2 minutos
Coles de Bruselas: de 3 a 5 minutos, dependiendo del tamaño
Coliflor (cortada en trozos de 2.5 cm): 3 minutos
Hojas verdes: 1 a 2 minutos
Chícharos en vaina: 2 a 3 minutos
Chícharos sin cáscara: 1.5 minutos
Chayote sin espinas: 2 minutos
Calabazas italianas: 3 minutos
Contenido originalmente publicado en The Happening.