Los precios de varios productos básicos para llevar una alimentación saludable se dispararon a causa de la pandemia por Covid-19. Esto ocasionó que 3 mil millones de personas en el planeta perdieran el acceso a ellos.
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Se ha hecho mucho hincapié en elegir correctamente los alimentos para poder llevar un estilo de vida sano y así reducir el riesgo de diferentes enfermedades. Sin embargo, un estudio realizado por la Universidad de Tufts indica que cerca del 40% de la población se ha visto obligada a llevar una dieta de mala calidad, porque los productos chatarra son más económicos.
Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas ha señalado que la crisis económica de 2020, derivada en gran parte de la pandemia de Covid-19, detonó uno de los mayores aumentos en las cifras de personas subalimentadas de 2019 a 2020.
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Una gran parte de la población se ha visto reducida a seguir dietas en las que predomina la comida rápida y los productos procesados. De acuerdo con Anna Herforth, codirectora del proyecto Food Prices for Nutrition, el problema radica en que los artículos saludables simplemente no son accesibles.
Aunque año con año los precios de los alimentos suelen aumentar, entre el 2020 y 2021 han presentado una importante alza de precios, que parece no detenerse. Un estudio encabezado por el profesor de economía William A. Masters, indica que esto ha resultado en que aunque que el grueso de la población de Estados Unidos tenga acceso a arroz, frijoles, espinacas, atún enlatado y pan, muchas personas en África y Asia no podrían adquirir los mismos artículos aunque dedicaran todo su salario a ello.
Sin embargo, de acuerdo con ese mismo estudio, aunque el 60% de la población restante sí puede acceder a una alimentación saludable, no es garantía de que la consuman. Esto se debe a que el marketing, la falta de tiempo y el estilo de vida en general suelen orillar a consumir una gran cantidad de productos chatarra. Situación que preocupa a los expertos, quienes aseguran que en un futuro cercano es muy probable que esa gente se enfrente a problemas de salud como desnutrición, anemia y diabetes.
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De acuerdo con los reportes de los organismos de la ONU, la pandemia ha evidenciado aún más las deficiencias de los sistemas alimentarios responsables de asegurar y promover una alimentación saludable alrededor del mundo.
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