El restaurante L’Ostería del Becco, ubicado en el corazón Polanco, se renovó y es toda una experiencia. Se puede sentir la magia que sucede en su cocina, a través de un cristal en el que puedes ver todas las preparaciones y el movimiento de los fogones.
El lugar es muy luminoso, tiene un estilo elegante y moderno, que te hará viajar a Italia con un bocado. Hay dos terrazas, una en la fachada y otra al fondo, donde puedes disfrutar la mixología. El servicio es muy bueno y en L’Ostería del Becco siguen todas las medidas sanitarias.
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Empezamos con una copa de Aperol Spritz como aperitivo, seguido de una tabla mixta de embutidos, con prosciutto, mortadela, queso Pecorino, rocas de parmesano, acompañados de una mermelada de jitomate dulce. Un plus es que te traen focaccia al romero recién horneada en casa.
Seguimos con una burrata con caponata de pimientos rojos, calabaza y berenjena, acompañada con pan artesanal. De plato fuerte probamos una pizza de queso mozzarella, provolone y prosciutto. La masa es fermentada por 72 horas, por lo que es esponjosa y tiene una textura ligera: ¡imperdible! Probamos dos pastas, la primera fue un pappardelle con ragú de ossobuco, luego unos ravioles rellenos de mascarpone con mantequilla al limón, tinta de sepia y botarga fresca. Una explosión de sabor.
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El maridaje lo hicimos con vino blanco, muy ad-hoc para armonizar los sabores de los platillos. Para cerrar con broche de oro probamos un pastel mil hojas deconstruido con frutos rojos y crema de chocolate obscuro, y un tiramisú clásico. Buon Appetito!
¿Dónde? Goldsmith 103, Polanco, Ciudad de México.
