Trillo y la pasión por cocinar

Originario de Sinaloa, el chef Andrés Trillo heredó el amor por la cocina de su madre y si bien por algún tiempo se dedicó a la construcción como una “profesión de verdad”, terminaría por abrazar su verdadera pasión: los fogones. Empacó maletas y se mudó a Francia en donde adquirió conocimientos en Le Cordon Bleu en París; desde entonces, el chef ha fusionado su tradición con una vasta experiencia internacional, trabajando en icónicos restaurantes como Le Grand Véfour de Guy Martin y Casa Marcial de Nacho Manzano en España.

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Como a todos, la pandemia significó para él un momento clave. Ya había constituido el primer taller de gastronomía en su tipo en la ciudad, y exitosamente, pero dentro sabía que necesitaba algo más, y como resultado de esa búsqueda nace Trillo. Su primer restaurante, ubicado en la colonia Roma.

No pensé en este lugar como un hotspot, sino como un sitio que trascienda en el tiempo. Entonces la base que lo sostiene es la constancia; tengo 50 años y puedo decir que lo hago en el momento justo, cuando cuento con una mayor madurez culinaria”- chef Andrés Trillo.

En Trillo la atmósfera es relajada, extensión sin duda de la personalidad del chef. Se trata de un restaurante que se siente acogedor, en donde bien puedes pasar una tarde en familia o una noche de amigos con buena selección musical de fondo. La carta es variada y un reflejo también de la mente inquieta de Andrés, así como de su visión de no ofrecer solo un tipo de comida, sino crear una experiencia que adentre al comensal en el mundo de los sabores que han encantado a Andrés Trillo a lo largo de su vida.

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Así, en el menú encontrarás desde unas monchosas Coles de Bruselas fritas con granada y puré de nuez de la India (que estoy segura querrás llevarlas a tu casa y disfrutarlas en una noche de pelis); un fresco salteado de hongos silvestres y hummus; exquisitos tacos de lengua estofada y frijoles puercos que son un homenaje a los preparados por su madre en Sinaloa acompañados de una salsa picosita, sumamente casera, o unos calamares rellenos de chicharrón prensado con alioli de limón.

Además de una gama de postres como: tarta de chocolate, avellanas y caramelo, acompañado de helado praliné; panqué de aceite de oliva, helado mascarpone con amarena y fruta de estación; créme brulée de alcachofa; arroz con leche asturiano; y pumpkin pie de temporada.

Estoy inspirado por el lugar donde nací y por lo que conozco. Tengo un amigo que recién ganó su tercera estrella Michelan en Asturias, Nacho Manzano, y los veranos voy con él dos semanas, y veo y aprendo y voy jalando como de todos lados un poquito; me fascina la cocina asiática y entonces pongo cositas asiáticas, pero también pongo de Europa, desde luego algo francés porque es donde me formé”- chef Andrés Trillo.

En el aspecto líquido, Trillo ofrece desde cócteles hasta cervezas y una carta de vinos internacionales, entre mexicanos, italianos, franceses y españoles.

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La filosofía del chef Andrés Trillo es crear platillos con sabores equilibrados y potentes, en donde no sea necesario añadir elementos que sólo encarecen el plato pero no le aportan ningún valor. Cocina honesta, sin pretensiones, cuyo móvil sea sólo el de hacer lo que le apasiona y ofrecerlo a un público amante de la gastronomía que busque una experiencia culinaria rica y atemporal.