El vino europeo enfrenta impacto con aranceles impuestos por Donald Trump

Las leyes están jugando en contra de la industria vinícola europea.
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Estados Unidos ha ampliado sus planes para imponer tarifas a los alimentos, pero la industria del vino europeo podría enfrentarse al mayor de estos problemas: un arancel del 100% a partir del 14 de enero del 2020.

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Una cosa es cierta: a (casi) todos nos gusta el vino. Pero de unos meses para acá, la administración del actual presidente de Estados Unidos, pondrá en problemas a la industria del vino europeo. De acuerdo a una publicación del New York Times, Estados Unidos importa más de $4.25 mil millones al año en vino del viejo continente.

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En octubre del 2019 se impuso un primer arancel del 25% a vinos franceses, españoles y alemanes. Esto quiere decir que los compradores interesados en adquirir esos bienes tendrían que pagar 25% más del precio final del producto. La administración de Donald Trump justificó estas tarifas con la finalidad de proteger las industrias nacionales. El vino no es el único afectado. Se agregaron represalias arancelarias a bienes europeos como quesos, aceite de oliva, licores y cosméticos. En un inicio se esperaba que el impuesto se redujera, pero sucedió todo lo contrario. La nueva tarifa del 100% abarca productos como el vino espumoso y podría entrar en vigor a partir del 14 de enero.

¿Es un problema reciente?

En realidad no. En 2004, el Gobierno estadounidense denunció ante la Organización Mundial del Comercio a la Unión Europea por un trato al fabricante de aviones europeo Airbus que perjudicó a la empresa estadounidense Boeing. En 2010, el organismo dictaminó a favor de EE UU y es hasta 2018 que la OMC autorizó los aranceles por valor equivalente a los daños.

La batalla de continentes

¿Servirá de algo este impuesto? La industria del vino europeo buscará otros compradores y llevarán sus productos a Asia u otros países de Europa. Pero, ¿qué sucederá con las cadenas de restaurantes y tiendas de licores dentro de Estados Unidos? Se perderán trabajos y cerrarán negocios siendo los estadounidenses los únicos afectados.