La actriz mixteca que ha robado los corazones de México y el mundo por su actuación en ROMA, nos contó qué es lo que más extrañó de la cocina de su tierra mientras promocionaba la película.
MEMORIAS DE LA INFANCIA
Mi mamá hacía un pollo que freía con la grasa de la piel del animal a la que después le dejaba caer una salsa de jitomates y chiles asados con orégano. ¡Me encantaba! De postre, su arroz con leche.
LO QUE MÁS EXTRAÑA
Ahora que he pasado mucho tiempo fuera de México, lo que más extraño de Tlaxiaco, mi comunidad en Oaxaca, es la masita. Es un caldo de masa con algunos granos de elote, chile, hoja de aguacate, carne de borrego y algunos otros ingredientes. Es muy representativo de la gastronomía mixteca y es casi imposible encontrarlo fuera de México.
SABORES FORÁNEOS
En Venecia comí calamares fritos por primera vez. Nunca los había probado y creo que es lo que más me ha gustado de todo lo que probé en los viajes para promocionar la película. Estaban riquísimos.
COCINA DE MAMÁ
Me fascina su mole negro. No sé cómo lo prepara. Cada región tiene un diferente tipo de mole, pero a mí me gusta muchísimo el de mi mamá porque no es ni dulce ni picoso. Es un punto medio perfecto.
BEBIDA FAVORITA
Para desayunar, el jugo de naranja. Pero si se trata de celebrar o tomar algo más fuertecito, el mezcal de pechuga.
TALENTO EN LA COCINA
Pues como dicen por ahí, yo solo cocino para sobrevivir. Siento que no tengo buen sazón. Tal vez lo que mejor hago son los postres, aunque no me sé ninguna receta, pero algo me invento y sale rico casi siempre.
EL CATERING DE ROMA
Pues todo era muy rico. Yo siempre pasaba con mi plato para probar de todo un poco. La señora que cocinaba me decía que yo era la única que no le hacía cara a nada de su comida y hasta me regalaba doble postre.