Club Hambriento: Ana Brenda

La actriz Ana Brenda platicó con nosotros sobre sus platillos favoritos, destino culinarios predilectos y comida que le recuerdan a su infancia. Conoce su lado más sabroso: Lo que pocos sabían sobre Ana Brenda Contreras es que le fascina comer y una de sus pasiones es el turismo gastronómico. Platillo de la infancia  La machaca […]

enero 11, 2018

Club Hambriento: Ana Brenda

Foto: Fer Ivarra

La actriz Ana Brenda platicó con nosotros sobre sus platillos favoritos, destino culinarios predilectos y comida que le recuerdan a su infancia. Conoce su lado más sabroso: Lo que pocos sabían sobre Ana Brenda Contreras es que le fascina comer y una de sus pasiones es el turismo gastronómico. Platillo de la infancia  La machaca con huevo. Es carne seca típica del norte de México que se dora en aceite de oliva. Cuando la preparo pongo la carne seca en la licuadora antes de mezclarla con el huevo para que quede como mantequilla, después le agrego jitomate, cebolla, chile, un poco de huevo y listo. Aunque generalmente se come en taco con una tortilla de harina suave, a mí me gusta con la tortilla ligeramente quemada. Snack favorito Me encantan las almendras. Último destino y qué comer ahí Perú, todo es rico allá. En eso se parece mucho a México. Hay que comer cebiche y visitar los restaurantes de comida chifa (comida fusión china y peruana). Destino gastronómico favorito ¡México y sus mercados! ¿Qué restaurante te sorprendió en los últimos meses? Cosme, de James Berckmeyer, en Lima, Perú. Ana Brenda en la cocina Me encanta cocinar, es mi terapia. Siempre me encargo del pavo en Día de Acción de Gracias. Comida que te hace pensar en México Los taquitos. Siempre extraño un buen taco. Entre más callejero, mejor. Maridaje memorable Hace poco estuve en España conociendo los viñedos de Ribera del Duero. Mi manera favorita de disfrutar el vino es con pan recién horneado, aceite de oliva, tomate y jamón. Ese maridaje fue mi sueño hecho realidad. En esa experiencia comprobé que el vino que te tomas huele a su zona de origen. Por eso ahora, cada vez que abro una botella, me recuerda el lugar donde estuve.  

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