Bienvenido a la edición de esta semana de el mundo sería un mejor lugar si todos fuéramos más como José Andrés. No hay necesidad de decirlo, pero la calidad de cocina global también mejoraría mucho si tuviéramos la sensibilidad del chef. Pero como probablemente ya sabes, su organización World Central Kitchen ha probado en repetidas ocasiones que lo que sucede en la cocina es solo una pequeña parte de sus contribuciones a la sociedad: Andrés y su equipo han alimentado a Puerto Rico, a migrantes en México, a trabajadores federales durante el cierre del gobierno y la lista sigue y sigue
Durante el fin de semana, Andrés uso Twitter para mostrarnos su última buena acción: ofrecer trabajo a una mujer que fue despedida por tener la audacia de alimentar a un estudiante de preparatoria.
En marzo, Bonnie Kimball fue despedida de su trabajo como trabajadora de la cafetería de la Preparatoria Mascoma Valley Regional en Nuevo Hampshire después de dar a un estudiante un lunch gratuito cuando no tenía suficiente saldo en su cuenta. Según Associated Press, fue retirada de su cargo aunque la cuenta fue saldada el siguiente día. Desde entonces la escuela se arrepintió de haberla despedido, diciendo que el acto había violado sus políticas, pero que Kimball podía regresar sin embargo, como es de esperarse, ella decidió que no quería volver trabajar para estas personas.
Pero si de casualidad Kimball aún seguía buscando trabajo, Andrés le ofreció ser un jefe mucho más comprensivo. Después de que el chef se enterara de la historia de Kimball que llegó a los titulares tuiteó ¡Bonnie Kimball es una heroína! Si necesita un trabajo tenemos vacantes el @thinkfoodgroup, si alguien la conoce, haganle saber. De acuerdo con el Boston Herald, Andrés incluso llamó a Kimball para presentar la oferta más oficialmente aunque hasta ayer, no sabemos si ella acepto o no. (Tampoco está claro dónde estaría ubicado el trabajo: Nuevo Hampshire no está cerca de alguno de los mercados de Think Food Group).
Aún así, creemos que es seguro asumir que la oferta laboral de Andrés es más que un simple gesto vacío. Otro de los rasgos del chef al que todos podríamos aspirar: cuando dice que hará algo, lo hace.