Calesita (como llamamos por estas latitudes a un carrusel) nació hace ya cuatro años de la mano de talentosos cocineros de Buenos Aires. Es un evento gastronómico, cultural, lúdico, un poco extraño y muy divertido. Su cuarta edición será el 12 de junio.
Los tres chefs que están reinventando la cocina latinoamericana
¿Y cómo funciona? Fácil. Algunos restaurantes de la ciudad -ocho, en esta ocasión- actúan de sede, recibiendo en sus cocinas a colegas invitados, compatriotas e internacionales para ofrecer en conjunto un menú único y efímero, durante una velada. El plan es simple: girar por los distintos restaurantes sede probando platos de los mejores cocineros de la región. En espíritu de elige tu propia aventura, cada comensal arma su propio recorrido. Hay quienes se sientan en un restaurante hasta probar todo lo disponible, y otros que picotean un par de platos para partir con celeridad a la próxima parada.
No hay entradas, tampoco reservas, mucho menos un orden predeterminado. Los restaurantes sede funcionan en paralelo durante toda la noche, recibiendo comensales que se suman a la vuelta vespertina. Para realizarla, circulan entre sedes buses antiguos, de esos que ya no se ven por la calle, donde la fiesta continúa: payasos, drag queens y buena música animan el trayecto.
Además de la noche de locura, este año Calesita reafirma su rol cultural organizando un conversatorio de gastronomía latinoamericana, un espacio de discusión para que los chefs debatan sobre el presente y futuro de nuestra industria.
Arriba de la Calesita
¿Cuáles son estas sedes? Niño Gordo, de Germán Sitz y Pedro Peña, recibe a Mitsuharu “Micha” Tsumura de Maido, Pedro Chavarría de Demo, Camila Fiol de Fiol Dulcería y a Lele Cristobal, con la cocina de su icónico Café San Juan.
Rodolfo Guzmán de Boragó, Gonzalo Aramburu del restaurante homónimo, Tomás Treschanski de Trescha y Emiliano Yulita del Mercado se suman a la dupla Sitz-Peña en su más reciente restaurante, José El Carnicero.
En Mengano, el Bib Gourmand de Facundo Kelemen, cocinan James Beckemeyer de Cosme, Jaime Rodríguez de Celele y Alejandro Feraud de Alo’s. Muy cerca, el flamante Victor Audio Bar recibe a Sebastián Weigandt de Azafrán, Fernando Santarelli de Negre Restaurante y a Karai, el proyecto chileno de Micha Tsumura.
Un clásico de calesita y una novedad. Mariano Ramón, chef del ya clásico calesitero Gran Dabbang, une fuerzas con Valentina Arteaga de Phayawi, Anthony Vázquez de La Mar, Maxi Rossi de Ultramarinos y Leo Lanussol, del nuevísimo Ness. Por primera vez, Crizia de Gaby Oggero se sube a la Calesita, con Sergio Díaz de Sublime, Antonio Moreno de Casa Las Cujas y Juan Ventureyra de Riccitelli Bistró.
Gonzalo Aramburu: de la revolución culinaria a las dos estrellas Michelin
Julio Báez es otro de los cocineros que nunca falta en Calesita. Esta vez participa con su restaurante Julia, donde cocinan Tassia Magalhaes de Nelita, Pablo del Río de Luigi Bosca Finca El Paraíso y Mercedes Román de Obrador Florida.
No hay comida sin bebida, así que el lineup se completa con bares: Tres Monos, el mejor bar de Sudamérica según 50Best, cede su barra a Aaron Díaz de Carnaval en Lima, para quienes quieran beber un cóctel entre restaurante y restaurante. La noche finaliza en La Uat, con el tan importante fiestón de cierre.
Brindis, risas, algo de delirio. Calesita es un evento imperdible para aquellos que estén en Buenos Aires y quieran viajar, al menos por unas horas, por todo nuestro continente.
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