Todos conocemos el típico omelette enrollado, aquel que se rellena en el sartén y a veces se rompe por exceso de ingredientes. La técnica francesa no es tan diferente, de hecho es el mismo procedimiento pero con una variante: se rellena después de doblar. Aquí te decimos los pasos exactos para obtener el mejor omelette al más puro estilo francés.
También te puede interesar: ¿Cómo hacer manguitos con chile caseros?
1. Lo primero que debes hacer es derretir un poco de mantequilla sin sal (1/2 cucharada) en un sartén antiadherente. 2. Después, en un bowl mediano bate 3 huevos, añade sal y pimienta al gusto. Bate vigorosamente hasta formar espuma. Tip extra: Aunque no es parte de la receta original, para mayor cremosidad puedes añadir un poco de crema para batir, verás que enriquecerá el sabor del omelette. 3. Con mucho cuidado, añade la mezcla de huevos a la sartén caliente y mueve constantemente de afuera hacia adentro (por 40 segundos). Así evitarás que se cocine irregularmente. 4. Con ayuda de una espátula empuja los bordes hacia el centro (como si hicieras un taco) y deja cocinar por 2 minutos o hasta que obtengas la consistencia deseada. 5. Empuja el omelette del sartén al plato (con los bordes del dobles hacia abajo) y corta por la mitad con un cuchillo. 6. Con una cuchara puedes añadir el relleno que quieras (champiñones y queso mozzarella siempre son buena opción). El omelette requiere práctica y paciencia, así que dedica un día de la semana para dominar al rey de los desayunos.
