Laura Santander nos recomienda vinos del Bajío

La sommelier Laura Santander nos contó su trayectoria profesional y nos recomendó sus vinos favoritos del Bajío mexicano.
laura santander

La formación de Laura empezó a los 14 años gracias a su familia, que siempre tuvo un espíritu viajero y muchas ganas de visitar los viñedos del mundo. A esa edad, y luego de conocer las zonas vinícolas de Francia, Laura tomó prestado el pasaporte de su hermana, que era mayor de edad, y se inscribió a un club de vino. “Me corrieron”, cuenta Santander entre risas; “seguro sí era muy evidente que la del pasaporte no era yo, pero en ese momento yo juraba que no. Entonces intenté estudiar todo lo que estuviera disponible”, explica.

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Cuando Laura entró a estudiar Hotelería al CESSA confirmó su amor por el vino y siguió con certificaciones internacionales. Después hizo su carrera profesional en restaurantes como Eloise y Loretta: “estuve haciendo cartas de vino increíbles, probando todo lo que quería y con oportunidades para viajar. Me dediqué 10 años a eso, y luego llegó la pandemia.”

Foto: Juan Pablo Espinosa

Durante la pandemia, Santander detectó necesidades en la industria del vino: ante el cierre de restaurantes, hacía falta un lazo entre el productor y el cliente; entonces comenzó con varios proyectos, uno de ellos fue ‘Vinos del super’, que surgió a partir de una ocasión en la que la sommelier estaba en un supermercado y escuchó a un vendedor recomendar vinos a un cliente. “Estaban recomendando vinos que yo no le recomendaría ni a mi peor enemigo, entonces yo me metí: ‘¡no, señora, ese vino no!, ¡pruebe este vino, y este!’”. Para apoyar a los proveedores de vino, la sommelier comenzó con el programa Catar para ayudar, en el que apoyó a bodegas o distribuidores que habían perdido el vínculo de la venta.

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Hoy, Laura está por iniciar con su proyecto ´La Winería: vinos para todos´, una tienda apoyada en la tecnología que, en vez de un display de bebidas, tendrá pantallas en donde los clientes podrán seleccionar sus vinos por diferentes momentos de consumo, desde cenas formales hasta tardes de alberca, o por maridaje: para las comida con paella o con cochinita pibil. La Winería estará cimentada sobre la tecnología de Wine Advisor, donde Santander se desempeña como Directora de Desarrollos Especiales a nivel global y como encargada de las áreas de contenido y consultoría.

Foto: Juan Pablo Espinosa

Otra de las iniciativas en las que participa Santander es en Hermitage, en sociedad con el sommelier Miguel Ángel Cooley. Se trata de un espacio pensado para eventos, catas o reuniones, en donde la columna vertebral es el vino. “Una parte muy importante para mi es Hermitage”, nos cuenta Laura. “Tenemos la posibilidad de tener un lugar increíble para eventos privados a la medida, donde puedes hacer desde una cata de vinos con la mejor cristalería del mercado, el personal más capacitado y una pantalla perfecta para dar clases, hasta un baby shower, un bautizo o una boda. Aquí, Miguel y yo hacemos lo que se nos antoja: podemos abrir un Grand Cru de Saint-Émilion, hacer una comida con Petrus o con vinos del Bajío.”, abunda, para después asegurar que está “viviendo un sueño con Hermitage, Wine Advisor y La Winería”. Por si fuera poco, Laura es vocera de las regiones de Oregon y Washington.

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Para la sommelier, lo más importante cuando uno se dedica al vino es la disciplina: “hay que estudiar diario, no puedes darte el lujo de no estudiar un día”, explica, “además hay que tratar de ir a todos los eventos, inscribirse a todas las revistas, escuchar todos los podcasts, dedicar una parte del sueldo a vinos y, si está en las posibilidades económicas, a viajes.” 

La selección de Laura Santander

Füji, Casa Vegil

Foto: Cortesía

Variedades: Chardonnay y Pinot Noir

Región productora: Querétaro

“Este vino del enólogo Fernando Cortés es sorprendente y demuestra que esta vinícola es de las pocas que están dispuestas a esperar el tiempo que sea necesario y aprender añada con añada. Es una bodega que definitivamente hay que tener en la mira. Füji es un espumoso hecho con el método tradicional o champenoise; es una mezcla de Pinot Noir y Chardonnay que sabe a elegancia y demuestra de forma magistral cómo vinificar un espumoso; es seco y tiene notas a frutos amarillos”.

Laberinto rosado, Cava Quintanilla

Foto: Cortesía

Variedades: Grenache y Syrah

Región productora: San Luis Potosí

“Tuve la oportunidad de probar este vino en una cata a ciegas, cuando la botella no tenía ni etiqueta; la añada estaba escrita sobre el vidrio con un plumón. Resultó una gran sorpresa, una forma increíble de lograr un vino estilo Provence en San Luis Potosí. La uva Grenache con la que está hecho lo hace elegante y fresco. Tiene notas a fruta fresca y granada china. Además es un vino súper repetible, yo podría tomarlo a diario”. 

Irreverente, Gonher Wines

Foto: Cortesía

Variedades:  Cabernet Sauvignon, Grenache, Nielluccio

Zona productora: San Luis Potosí

“Irreverente tiene un cachito de mi corazón: las mezclas están a cargo de Omar González, un amigo muy querido que se inspiró en su hija para elaborar los vinos. Ella es muy chiquita, pero decidió qué notas quería que tuvieran los fermentados. Este se llama irreverente porque él es así, y tiene la etiqueta de Bansky; él le puso un racimo de uvas. Irreverente es joven y muy fácil de tomar”. 

Piscis

Foto: Cortesía

Variedades: Chardonnay

Región productora: San Luis Potosí

“Piscis es otro vino hecho en San Luis Potosí. La encargada del proyecto es Karla Correa, una persona tremendamente tenaz, con la mirada puesta en que las cosas se hagan bien. Este es un Chardonnay, cualquier persona que lo tome se sorprenderá por su limpieza; es un gran ejemplo de cómo se expresa la variedad en esta zona. La enóloga es Agostina Astegiano, una muy querida amiga. Este vino siempre lo recomiendo porque es el trabajo de dos mujeres súper talentosas”.

Tío Neto, Puerta de Lobo

Foto: Cortesía

Variedades: Merlot, Cabernet Sauvignon, Syrah

Región productora: Querétaro

Puerta de Lobo es una vinícola que significa mucho para mí por muchas razones, pero una de ellas es que tuve la oportunidad de casarme ahí. Tengo una gran amistad con los dueños, y he visto el crecimiento de la bodega. Los vinos tienen una personalidad única y propia. Tío Neto es un vino potente, lleno de frutos negros y rojos y que, definitivamente, requiere ser acompañado con algo de comer. Me emociona mucho hablar de vino queretano y del proyecto de Puerta de Lobo.

Gran Reserva, Tres Raíces

Foto: Cortesía

Variedades: Cabernet Sauvignon y Merlot

Región productora: Guanajuato

“Sin lugar a dudas, Tres Raíces es la bodega que ha evolucionado más en menos tiempo. La conocí durante la pandemia; un año y medio después volví a probar sus vinos y me llevé una muy grata sorpresa. El enólogo, Matías Utrero, es sorprendente: llegó a producir vinos de gran calidad en muy poco tiempo. Los vinos de Tres Raíces siempre te van a sacar una sonrisa”.

GW Ancestral, Vinaltura

Foto: Cortesía

Variedades: Gewürztraminer

Región productora: Querétaro

“GW Ancestral es un Gewürztraminer elaborado por Vinaltura; es uno de esos vinos que sorprenden. Está hecho con un método ancestral que no es fácil de controlar. En nariz destaca el lichee, los frutos tropicales y las flores blancas. Es un vino muy fácil de tomar, pero lo más importante es poner atención a cómo se comporta: tiene una burbuja muy sutil que lo hace agradable en boca”.

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