Los festivos de Semana Santa son oportunidad de encuentro en familia y recogimiento espiritual. Y también por eso mismo, son ocasión para disfrutar de platos de pescado tanto en casa como fuera de ella. En cualquier caso, la opción de un buen maridaje con un vino blanco está presente y la Guía Peñín, sin dudas, es una excelente orientación para no fallar en el intento.
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Con un máximo de 100 puntos, aquellos vinos que superan los 90 son considerados dentro de la elite de la producción vinícola, verdaderas joyas en el paladar. Opta entre estas 3 selectas opciones la que mejor maride con el plato de pescado que elijas para celebrar estas Pascuas.
1. Gaintza Aitako 2019, un poderoso vino blanco del País Vasco
El Gaintza Aitako 2019 es un vino blanco procedente de la región del Getariako Txakolina en el País Vasco, que ha conquistado a críticos y amantes del vino por igual. Este vino seco, elaborado principalmente con las uvas Chardonnay y Hondarribi Zuri, ofrece una experiencia sensorial única que realza la frescura y la sutileza de los pescados.
En la copa, el Aitako 2019 se presenta brillante y límpido, con finísimas burbujas que denotan su cuidadosa elaboración. Su complejo y intenso aroma a piña y manzana, seguido de un toque mineral, anticipa una experiencia gustativa inolvidable.
En boca, su frescura se mantiene intacta a pesar del tiempo de guarda, ofreciendo suavidad, volumen y un equilibrio excepcional. Este vino con cuerpo y un largo final es la elección perfecta para acompañar tus platos de pescado esta Semana Santa.
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2. Viña Gravonia Blanco 2015, un destacado de los vinos blancos de Rioja
El Viña Gravonia Blanco 2015 es una joya vinícola que proviene de la prestigiosa bodega López de Heredia en la región de Rioja. El nombre “Viña Gravonia” se inspira en los viñedos adyacentes a la bodega y refleja la historia y la pasión que se encuentran detrás de cada botella. Este vino, elaborado exclusivamente con la variedad Viura, es un testimonio de la tradición y la elegancia que caracterizan a los vinos blancos de Rioja.
El Viña Gravonia Blanco 2015 se presenta en la copa con un color oro pálido que invita a explorar sus aromas frescos, complejos y evolucionados. En boca, su perfil afrutado, complejo y muy fino deleita los sentidos, ofreciendo una experiencia sensorial única.
Con su acidez equilibrada y su largo final, este vino es el compañero ideal para pescados cocidos, fritos o a la plancha, así como mariscos y carnes blancas con salsas consistentes.
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3. Rafael Palacios Louro Godello 2022
El Rafael Palacios Louro Godello 2022 es un vino blanco joven que captura la esencia de la región de Valdeorras en Galicia. Elaborado con las variedades Godello y Treixadura, este vino seduce con su ligereza y su rica paleta aromática, ofreciendo una experiencia de cata inolvidable.
Al acercar la nariz a la copa, se despliegan frescos aromas de manzana verde y pera, complementados por un toque especiado de laurel que confiere una singularidad cautivadora. En boca, su frescura y su acidez equilibrada invitan a un sorbo tras otro, mientras que su perfil aromático evoca un paseo por el huerto en plena primavera.
Este vino es el complemento perfecto para aperitivos, risottos, mariscos y pescados blancos.
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