Recientemente salió a la luz que debido al miedo de una posible epidemia entre los cerdos chinos, las compañías han decidido tomar cartas en el asunto y están buscando implementar un sistema de reconocimiento facial entre sus animales para salvarlos.
Según una investigación de The New York Times, hay mucho en juego. Con una población de aproximadamente 400 millones de cerdos, China es uno de lo productores de cerdo más importante del mundo, así que no es sorprendente que quieran hacer algo al respecto.
La fiebre porcina no tiene cura ni vacuna y se puede esparcir muy fácilmente entre los mismos animales o en cualquier producto que derive de éste. Y aunque la fiebre no afecta a los seres humanos, éstos se vuelven portadores de la bacteria.
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Algunas empresas ganaderas están implementado la misma tecnología que se utiliza en las calles para garantizar la seguridad nacional. Y de igual manera, el gobierno chino está impulsando este tipo de proyectos tecnológicos en distintas granjas y esperan que en 5 años estas estrategias funcionen en su totalidad. A esto se le llama intelligent farming y se considera el futuro de la ganadería y agricultura. A pesar de que todo esto suena muy bien para el desarrollo del mercado porcino, muchos están escépticos ante la idea. Y según dijo el profesor Pfeiffer de la Universidad de Hong Kong al NYT, el reconocimiento facial no funcionará si no se tiene una base de datos clara de cada una de las caras de los cerdos. Además, él no es el único con dudas respecto a esto, los granjeros también creen que tal vez el proyecto no sea el más adecuado. Existen al rededor de 26 millones de pequeñas granjas de cerdo en China e implementar la tecnología en cada una de estas sería muy difícil.
