Aterrizamos en los sabores y aromas de las costas de Grecia, España e Italia, para que hagas un menú en casa. Como para una tarde con mesas cubiertas por manteles a cuadros, boquerones, copas de vino blanco y largas sobremesas bajo una pérgola.
- 16 calamares pequeños (apróx. 30 g cada uno)
- 1 pimiento rojo mediano, cortado en tiras
- 1 pimiento amarillo mediano, cortado en tiras
- 1 calabaza italiana mediana, cortada en rodajas
- 1 taza de jitomate cherry, cortados en cuartos
- ¼ de taza de aceitunas negras, sin hueso
- ¼ de taza de alcaparras
- 1 diente de ajo
- 1 chile de árbol, cortado en rodajas
- 2 racimos de albahaca fresca, deshojada
- 2 ramitas de tomillo fresco, picado
- 1 cucharada de sal de mar
- 1 cucharada de pimienta negra recién molida
- 4 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
- 1 taza de salsa de tomate
- 4 rebanadas de pan de campiña (aprox. 30 g cada una)
- 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
- ½ taza de queso parmesano, rallado
- 2 cucharadas de albahaca, fresca, picada
Ingredientes
- Limpia los calamares. Lava los calamares retirando la piel, espina dorsal de su interior y reserva en un colador.
- Corta los calamares horizontalmente en 3 partes. Calienta el aceite en una sartén grande y saltea de 2 a 3 minutos. Agrega las rodajas de calabaza y las tiras de pimiento. Después de 7 minutos añade las alcaparras, las aceitunas, los jitomates, los chiles y las hierbas aromáticas. Remueve bien antes de incorporar la salsa de tomate. Corrige el sabor con un poco de sal y pimienta y reserva.
- Precalienta el horno a 180 °C. Coloca los panes de campiña sobre una charola para hornear y baña con gotas de aceite de oliva y el queso parmesano. Hornea por 5 minutos o hasta que el queso se haya derretido. Retira y termina con albahaca picada.
- Sirve los calamares en un plato sopero y sobre estos las láminas de pan. Termina con aceite de oliva y albahaca fresca.