El mezcal que usa una pechuga de guajolote durante su destilación
Cortesía Montelobos

El mezcal es un destilado que ha demostrado una complejidad increíble, su tradición ha pasado de generación en generación y hay mucho que aprender de su elaboración. El sabor cambia dependiendo de muchos elementos: el tipo de agave, en dónde creció, la madera con la que lo cuecen, la levadura que se utiliza y el tipo de destilación. Pero existen otros procesos que pueden volver especial a un destilado, como el mezcal pechuga, que literalmente utiliza una pechuga de guajolote o pollo para aportarle una capa extra de sabor y textura a la bebida.Iván Saldaña, la mente detrás de Casa Lumbre, nos contó durante el lanzamiento de la nueva etiqueta Montelobos Pechugacuál es el proceso para llegar a este estilo tradicional. Su base inicia como cualquier mezcal espadín de la marca: con agave espadín orgánico cultivado, que después es cocido en horno de piedra, molido en tahona, fermentado con levadura salvaje y destilado dos veces en alambique de cobre.Es durante la tercera destilación que el proceso cambia porque aquí cuelgan una pechuga de guajolote dentro del alambique y especias maceradas (arroz, cacao, almendra, avellana, ciruela pasa, plátano , tamarindo, jamaica, mandarina, naranja y otros 14 ingredientes). Se realiza a fuego muy bajo, dura de 10 a 14 horas, tiempo durante el cual el vapor de la destilación se impregna e infusiona con las notas de la pechuga, las especias, las notas grasas y los aceites. El resultado es una bebida con cuerpo más denso y untuoso debido a la grasa de la proteína y con un interesante sabor tenue a frutos y nueces.Debido a la naturaleza de sus ingredientes, los mezcales pechuga suelen hacerse durante noviembre y diciembre, como una bebida para las fiestas. Otra característica es que, a pesar que acostumbran tener una graduación alcohólica superior, en boca resultan suaves y hasta dulzones. Por ejemplo, en el nuevo Montelobos Pechuga encuentras notas de jamaica, canela, mandarina y aceite de naranja con un final suave, aterciopelado aunque contenga un 48% de grado alcohólico. Si disfrutes de este