La crema inglesa es una salsa a base de yemas de huevo, azúcar y leche que se aromatiza con un poco de vainilla. Este tipo de “natilla” se puedes usar como base de un helado, un suflé, un cobbler, una tarta o un pastel.
- 1 litro de leche entera
- 1 o 1/2 vaina de vainilla (las semillas)
- 12 yemas de huevo
- 1 1/2 tazas de azúcar
- 1 bowl grande con hielos
Ingredientes
Utensilios
- En una olla grande de acero inoxidable, coloca la leche y las semillas de vainilla hasta que hierva.
- En un bowl bate las yemas y el azúcar hasta que tomen un color amarillo pálido. Con un cucharón toma un poco de la mezcla de leche, coloca en el bowl y mezcla poco a poco. Integra esa mezcla a la olla y prende a fuego medio. Mueve constantemente hasta que espese. No dejes que hierva ni que llegue a los 85 °C (si tienes termómetro).
- Una vez lista, cuela la mezcla en un colador fino dentro de un bowl limpio y colócalo en un recipiente más grande con muchos hielos y agua fría. Esto evitará que se cocine de más. Mueve constantemente.
- Una vez lista, la puedes cubrir y guardar en el refrigerador. Si lo deseas le puedes poner una pizca de nuez moscada para darle más sabor.