Fuimos al restaurante Torre de Castilla para probar el menú que el chef Aquiles Chávez preparó, en compañía de otros cuatro talentos (Marco Tenorio, Bernardo Riquelme, Omar Alpizar y Mauricio López), para el Festival Mexicano de Grupo Castellano. Te compartimos nuestras impresiones y qué fue lo que más nos gustó.
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La propuesta de Aquiles Chávez parte de las ideas que tiene en común con Mauricio López, chef ejecutivo de Grupo Castellano; es decir, respeto al producto para hacerlo brillar por sí mismo, lo cual se traduce en gastronomía tradicional hecha con esmero, cariño, sabor casero y porciones abundantes.
En cuanto a las entradas, destacaremos la tostada de pulpo enamorado, camarón, chile de agua encurtido y queso de rancho que ideó Mauricio López. Sus contrastes entre la frescura de los frutos del mar, el queso y lo crocante de la propia tostada dan como resultado un disfrute desenfadado que va muy bien con la piña pulcada propuesta como coctel de bienvenida por Aquiles Chávez. Esta combinación no tiene pierde.
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De los platos fuertes el que más disfrutamos fue la totoaba de cultivo a las brasas con salsa de queso manchego español, hoja santa y tapenade de aceitunas. Se trata de una combinación aparentemente sencilla, pero que encierra sabores complejos. El tratamiento y la calidad del queso resultan exquisitos y remiten a la cocina española y a la mediterránea cuando se mezclan con los otros elementos. Se sugiere maridar con la Reserva Tempranillo de Hacienda San Miguel, un caldo elegante y de gran sabor que recuerda la escuela francesa.
No sería justo olvidarnos del ícono de las fiestas patrias: el chile en nogada. Su ejecución es precisa y deliciosa, se sirve de manera abundante y a un precio que no nos pondrá a pensar si vale la pena o no. Por su parte, la barbacoa de cabrito acompañada de entomatado rústico de morita que nos ofreció Bernardo Riquelme hizo que repitiéramos taco. Hay también una tlayuda de tasajo de alfilerillo muy rica, pero que puede desconcertar a algunos por su precio, el cual supera al del chile en nogada debido a que lleva carne de calidad superior.
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Los platos que nos quedaron a deber un poco fueron el estofado de chambarete y el arroz a la tumbada con mariscos. Desde luego, son propuestas clásicas perfectamente ejecutadas, pero es posible que para algunos comensales resulten demasiado sencillas (el chambarete) o no tan bien encaminadas en la selección de algunos ingredientes (el arroz). Aun así, pensamos que tienen buenas posibilidades de encontrar su público ideal. De los postres, disfrutamos por igual el tiramisú de mamey con helado y el paste de arroz con leche y cajeta, aunque este último podría parecer algo seco para ciertos paladares.
Creemos que este Festival Mexicano cuenta con opciones para toda clase de gustos y cumple con su cometido de ofrecer platillos auténticos, bien preparados y a un precio competitivo. Estará disponible del 11 de septiembre al 11 de octubre en los restaurantes Centro Castellano y Torre de Castilla.
Dirección: Esopo 31, Polanco, CDMX
Instagram: @torredecastillamx
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