Agüita Fría es uno de esos lugares que sorprenden por su sencillez poderosa. En medio del bullicio citadino, este restaurante trae a la mesa una mirada honesta y contemporánea a la cocina veracruzana, una tradición tan vasta como poco representada en la capital. Su propuesta es clara y precisa: sólo dos proteínas —conejo y trucha— protagonizan el menú, pero lo hacen con una intensidad y cuidado que revelan lo mucho que se puede contar desde la restricción creativa.
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Para abrir apetito, destacan las truchitas fritas con mayonesa de habanero, una interpretación brillante de un clásico casero, así como la coliflor asada servida en un profundo mole almendrado —un imperdible para quienes gozan del contraste entre lo dulce y lo salado.
La carta también se divide en una sección de tacos, donde dos debes de probar, sí o sí: el taco de carnitas de conejo, que sorprende incluso a quienes no suelen disfrutar de esta carne, y el taco estilo Ensenada de trucha, acompañado de col encurtida y una mayonesa equilibrada. Cada uno se sirve con un set de cuatro salsas con distintos niveles de picor, pensadas para acompañar sin opacar.
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Además, el chef ofreció una de sus sugerencias fuera de carta: una trucha en curry con notas de miel —resultado de la fusión entre su oficio y el de su esposa, apicultora con el proyecto Mielosa. Un plato que pronto se incorporará al menú fijo y que pide a gritos ser acompañado con pan para limpiar hasta la última gota del curry.
El cierre llega con un helado de pistache que deja una impresión imborrable: con aceite de oliva y un toque de sal, logra un balance perfecto entre cremosidad, intensidad y sutileza. Un postre que, sin exagerar, puede arruinar cualquier otro helado de pistache que venga después.
Para beber, la carta de vinos recorre Italia, Francia y Grecia. En particular, el Windmill–Malagouzia —con notas minerales y flores blancas— se convierte en un gran aliado para maridar. Aunque si se prefiere, la coctelería del lugar también ofrece opciones frescas, aromáticas y perfectamente pensadas para arrancar la noche con el pie derecho.
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Agüita Fría es un espacio íntimo, de cocina honesta y técnica depurada, donde la memoria del Golfo se expresa a través de cada plato. Una celebración del presente, con los pies firmes en la tierra veracruzana.
Agüita Fría
Londres 54, CDMX
Martes a sábado – 1pm a 12am. Domingo – 11am a 6pm
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