Mr Blanco’s: el hit de las hamburguesas que abrieron en cuarentena

Las sliders de Mr Blanco’s se hicieron famosas por su inauguración en plena cuarentena. Pero el nuevo hot spot de la Cuauhtémoc ya llevaba un buen rato cocinándose.

mayo 25, 2020

Mr Blanco’s: el hit de las  hamburguesas que abrieron en cuarentena

Foto: Jake Lindeman

Llevábamos casi dos meses de encierro. Vimos que los restaurantes cerraban sus puertas y en este retador escenario no concebíamos la apertura de nuevos restaurantes. Abrieron, oficialmente, el 8 de mayo. “Ha sido increíble”, dice Daniel Delaney, creador del concepto. “Creíamos que cuando el restaurante estuviera terminado —y la pandemia no fuera parte de la escena— estaríamos vendiendo como 300 hamburguesas por día. Pero el sábado pasado vendimos 1,300.”

“Me acuerdo que había un lugar cerca de mi casa donde vendían sliders. Mis papás tenían un pequeño barco y por las tardes íbamos de paseo por el río y nos parábamos en este lugar,” me contó Daniel por teléfono. “Comprábamos una bolsa llena de hamburguecitas y seguíamos el camino por el río, mientras escuchábamos música. Este es uno de los mejores recuerdos de mi niñez, y continuamente me preguntaba ¿por qué no había más sitios así?”

Además de los recuerdos, Delaney, que creció en el norte de Nueva Jersey, tenía experiencia operando restaurantes en Nueva York. A eso se le sumó las cómplice perfecta. Poco tiempo después de mudarse a México —cautivado por la vida de la capital— conoció a Miwi (chef y socia de Pizzas Félix y Belmondo). Se hicieron buenos amigos y en una larga sobremesa en el Contramar, hablaron por primera vez de abrir un lugar como Mr. Blanco’s, un restaurante simple, sin demasiados elementos en el menú, fácil de operar. Una idea que rondaba en la cabeza de Daniel desde el 2009.

El concepto entusiasmó a Miwi y la emoción llegó hasta sus socios del grupo restaurantero Patagonia (Salón Ríos, Belmondo, Balboa, Koku). Ellos se ofrecieron a llevar la operación de Mr Blanco’s para que Daniel desarrollara el concepto creativo. Continuaron con el proyecto, consiguieron el local y pusieron manos a la obra. Todo parecía marchar viento en popa. Mr Blanco’s estaba listo para abrir en marzo o abril. Pero más temprano que tarde, se dieron cuenta de la gravedad de la pandemia. Hicieron una pausa y cambiaron la estrategia de construcción. Frenaron el desarrollo del área del comedor y enfocaron sus esfuerzos en la cocina y la zona de take out. Ahora, eso es lo que los mantiene a flote. 

La cocina de Mr Blanco’s es muy pequeña y no estaba preparada para la demanda. Hicieron un montón de modificaciones, montaron una prep kitchen en Polanco y movieron parte de su producción para allá. Ahí, es donde forman los patties de las hamburguesas —con carne USDA Angus y un blend que crearon exclusivamente para ellos— y guardan los tater tots. 

El equipo de trabajo de Mr Blanco’s está conformado por empleados de la plantilla del Grupo Patagonia. Ellos solían operar sitios que ahora permanecen cerrados, como el Salón Ríos. “Es increíble que en medio de todo esto, podamos emocionar a la gente. Que más allá de la comida, represente nuevas oportunidades de trabajo para ellos”, dice Daniel.  

En las últimas semanas, su cuenta de Instagram tuvo un crecimiento de 600% y las menciones de sus clientes se multiplican por hora. “No estamos enseñando un sabor nuevo. Es algo que la gente ya conoce, que les cae bien y les resulta familiar. Lo disfrutan. Además, es muy accesible. Yo quiero que la gente que trabaja en mi restaurante, pueda pagar la comida que ellos están haciendo sin ningún problema. De hecho, hemos visto que muchos de los repartidores de Uber o Rappi compran una hamburguesa para ellos y se la van comiendo en el camino”, añade.

¿Si hubieran abierto en otro momento, las cosas serían distintas? Daniel se pregunta lo mismo. “No estoy seguro de qué hubiera sucedido. Pero creo que parte del éxito se debe a que tenemos a la audiencia más cautiva en estos momentos. Están buscando algo qué hacer, algo que los emocione. Y nosotros pudimos poner eso en el mercado. En cuanto empezó el encierro, todos corrieron a poner sus productos en Rappi o en Uber. Y yo la verdad me asusté un poco, porque creí que íbamos a estar perdidos en un mercado completamente saturado. Pero nos esperamos, y abrimos con un par de olas después. En un momento donde no hay muchas cosas nuevas, logramos generar un sentido de comunidad de forma digital. La gente conectó y por un momento, se sintió parte de algo.” Las hamburguesas —con 50 gramos de carne, cebolla caramelizada y queso amarillo— cuestan $39 en sucursal y $49 en Uber o Rappi. Desde que abrieron, el 55% de sus pedidos desde apps viene de Uber, el 40% de Rappi y el 5% de Didi Food. 

El éxito de Mr. Blanco’s crece de forma exponencial. Esta semana extenderán su horario, de 9:00 AM a 1:00 AM con nuevas adiciones para un menú de desayuno. Sus planes a futuro incluyen la operación 24/7 de su burger joint y nuevas sucursales. Probablemente, son de los pocos restaurantes con planes tan optimistas dentro de esta pandemia. Pero su éxito da gusto, pues contagian su emoción. Finalmente, una pequeña slider a un precio accesible siempre será una buena noticia. 

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