A 40 minutos de la ciudad de Mérida, en Chocholá Yucatán se encuentra Chablé Yucatán. Una ex hacienda henequenera que ahora funge como un refugio exclusivo de la ajetreada vida urbana. Es un espacio en el que la conexión con la naturaleza es inmediata y la cultura se hace presente en cada rincón. No solo abraza su origen con estructuras y edificios patrimoniales originales en toda la propiedad, también mantienen vivas las tradiciones y creencias mayas como parte clave de su esencia.
En Chablé degustarás comida deliciosa con ingredientes recién cosechados de sus Ka’anche’s Mayas. Podrás visitar su meliponario con abejas sin aguijón endémicas de Yucatán, ver luciérnagas, descansar en la amplitud de su naturaleza y degustar creaciones únicas inspiradas en la cocina yucateca en su restaurante Ixi’im. Más que un hotel de lujo es un homenaje a la belleza natural del estado, sus raíces y su inequívoca identidad mexicana.
Como dos caras de la misma moneda, Casa Madero entona a la perfección con Chablé Yucatán por muchas razones. Su historia empieza en el Valle de Parras, Coahuila. Esta casa mexicana ha cuidado la elaboración del vino desde 1597, su resguardo de técnicas y secretos, hoy la posicionan como la más antigua del continente. Casa Madero ha sido reconocida por su tradición, calidad y compromiso con la sustentabilidad. Es también la bodega más premiada de México y referente en la industria.
Una marca que pone en alto el nombre de México en todo el mundo y su compromiso con la calidad los han posicionado como un símbolo irrefutable de la pasión del mexicano por la tradición vitivinícola.
Dos marcas que representan distintos matices de un solo concepto: nuestras raíces
Así como tomamos de la tierra, también es coherente devolver y ese pensamiento se mantuvo constante durante Sabores de Nuestra Tierra. Una experiencia gastronómica en la que el chef Hugo Sandoval, de la Hacienda San Lorenzo, unió su talento con el chef Luis Ronzón del restaurante de Chablé Ixi’im para crear una cena maridaje que celebró la tradición y sabores de México.
Cinco tiempos que se vivieron como uno mismo gracias a la maestría de los chefs y el talento de los sommeliers. La experiencia incluyó platillos con guiños claros a la cultura y sabores mayas como cerdo pelón confitado y cordero al PIB con repollo tatemado. Pero no dejó de sorprender con innovaciones como un taco de soft-shell crab con pipián verde y gel de lima agria.
Para el maridaje de los alimentos, Casa Madero seleccionó auténticas joyas enológicas. La experiencia comenzó con un vino fresco y afrutado: 2V 2024, un ensamble de Chardonnay y Chenin Blanc. A lo largo de la velada, los comensales fueron guiados por un abanico de expresiones vinícolas a través de seis etiquetas distintas. El cordero fue maridado con un Gran Reserva Shiraz 2016, y como broche de oro, se ofreció Brandy Madero, una edición exclusiva que ya no se encuentra a la venta y que hoy forma parte del acervo privado de la familia Madero.
Sabores de Nuestra Tierra fue una cena para poner en alto la cultura, tradición y sabores de México con dos autoridades completamente mexicanas en el mundo del estilo de vida. Chablé Yucatán y Casa Madero confirmaron la coherencia de su mancuerna con un evento que dejó huella.
Descubre mucho más de Casa Madero, su historia, legado y etiquetas en: madero.com/
IG: @casamadero
Puedes reservar en Chablé Yucatán para su próxima cena este 2 de agosto de 2025 con los chefs Alejandra Navarro y Ernesto Hernández del restaurante Botánico y enterarte de sus próximos eventos en:
IG: @chableyucatan
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