Gaby Ruiz inicia 2024 con dos sueños hechos realidad, ser madre y abrir Carmela DeMorada en la Roma, un restaurante cuya cocina incorpora los antojos que la chef tuvo durante su embarazo. “Poco después de encontrar el lugar perfecto, nos enteramos de que íbamos a ser papás, y eso fue un shock y una emoción enorme por todo el trabajo que nos venía encima, así que este menú fue inspirado en los antojos de mi embarazo”, explica la chef. “Carmela deMorada está dedicado a Martina, mi hija, que acaba de nacer y que, gracias a los antojos que me produjo surgió un menú de chile, limón y lágrimas de alegría”.
También puedes leer: Bitácora del paladar: Esta pudo haber sido una lista más
Algunos de los platos que conforman la carta son ligeros pero llenos de personalidad, como lo es Gabriela, con recetas como las coles de Bruselas con salsa de tamarindo y piloncillo; la ensalada de papaya verde y hierbabuena, los camotes fritos con salsa tártara con yogur o los tacos de hojas frescas, que en lo personal, me parece un plato que refleja el poder de la sencillez. Pero es tal vez el risotto con jocoque, queso parmesano y pollo con miel de mole el que está robando corazones.
La coctelería de Carmela DeMorada fue creada por el mixólogo Mica Rousseau, aplaudido por su trabajo en barras como Fifty Mils o Casa Prunes y que como gran amigo de Gaby y Rafa (Rafael López-Rubí es socio y compañero sentimental de la chef), ha captado al vuelo la esencia del lugar. “Es un proyecto que nace de la amistad que tengo con esta pareja increíble, y la inspiración fue un poco las notas salinas que vamos a encontrar en el menú, cocteles con destilados que en su mayoría son mexicanos”.
También puedes leer: Crónicas de los Placeres: Las citas pendientes
En cuanto al diseño, la interiorista Estefanía Araiza repite la experiencia de trabajar con ellos, ya que hace seis años diseñó Carmela&Sal, en Lomas de Virreyes, y el rediseño de Vuelve Carmela, en Villahermosa, Tabasco. En Carmela DeMorada pretende crear un oasis aislado en la caótica Ciudad de México. “Todos los que tenemos la fortuna de vivir en esta ciudad, entre el caos, el tráfico, los temblores, cada vez valoramos más nuestro hogar, necesitamos un Carmela Demorada, un lugar de resguardo, un paraíso en donde encontremos un poco de paz, donde no importa que lleguemos un poquito tarde, un lugar que llena de comida y amor el estómago y la mente”, señala Araiza.
El sitio cuenta con maderas reutilizadas, lámparas hechas a mano y materiales propios de México como el henequén de Yucatán, fibras de Morelia, piedras volcánicas; todas las mezclas de los muros son hechas de tierras naturales, no hay adhesivos ni químicos. La cocina en color rosa, al frente del restaurante, destaca la feminidad de la chef Ruiz y de Martina. “Crecimos con la idea de que el rosa es suave y dulce, y nos cuesta apropiarnos de esa fortaleza femenina fuerte que posee. Eso es lo que está en la cocina: el fuego, la pasión, la sal, la acidez”, concluye la interiorista.
También puedes leer: Alfredo Di Roma, tradición italiana que enamora
Carmela DeMorada ya se encuentra en la plataforma de OpenTable para reservar. Se ubica en la calle de San Luis Potosí número 134, colonia Roma Norte, y cuenta con valet parking en el estacionamiento propio del mismo edificio.
Sobre Gabriela Ruiz
Se ha convertido en un icono de la cocina vanguardista de México gracias a su sensibilidad, un sentido de la estética original y un conocimiento de la cocina mexicana sublime.
La chef tabasqueña conquista a través de los sabores de su infancia al tiempo que ofrece una cocina de I+D (Investigación + Desarrollo). Su trabajo durante muchos años ha girado en torno a la sinestesia, -sensaciones asociadas a estímulos externos-. “Algunas personas tenemos la sinestesia muy desarrollada, yo creo platillos a partir de canciones”.
También puedes leer: TANA, una cueva modernista llena de emociones y sabor
También los trampantojos, creaciones que no son lo que parecen, son característicos en su cocina. Tostadas de pata de cerdo que en realidad es coco nuevo y marlin adobado elaborado con coco viejo. Nada de proteína animal y cero colesterol.
Gabriela Ruiz Lugo nació en Comalcalco, en el Estado de Tabasco, en 1987. Licenciada en Gastronomía por la Escuela Culinaria del Sureste, estudió con los chefs Arturo Fernández y Luis Baroccio y continuó su formación con el carismático Aquiles Chávez. En 2012, con pasión y poco presupuesto, inició su faceta empresarial junto a su socio y compañero Rafael López Rubí: Gourmet MX en Tabasco, el primero de muchos proyectos.
En 2017 inaugura Carmela y Sal en Ciudad de México, ubicado en Lomas Virreyes.
Durante la crisis causada por el Covid-19, Gaby Ruiz lanzó Siempre Carmela, una línea de recetas tradicionales con un toque personal envasadas al vacío y perfectamente higienizadas y procesadas para la total seguridad de sus comensales y Vuela Carmela en la T2 del aeropuesto de Benito Juárez.
2023 cierra con dos maravillosos sueños hechos realidad: Camela DeMorada y Martina, la hija de Gaby y Rafa.
Síguenos en: Facebook / Twitter / Instagram / TikTok / Pinterest / Youtube
