De la vista nace el amor, todo lo que te llevas a la boca debería verse bien, son algunas frases que describen perfecto la importancia que tiene que algo luzca bien a la hora de comer. En el mundo gastronómico, emplatar los alimentos es prácticamente indispensable cuando se presentan los platillos a los comensales, pero, ¿cuándo y dónde empezó esto?
Emplatar o acomodar de manera estética los alimentos en un plato tiene sus inicios en la alta cocina europea durante el siglo XIX, aunque con el paso del tiempo se ha ido desarrollando y perfeccionando.
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En los archivos históricos podemos ver que en la Edad Media y el Renacimiento, los alimentos se servían en grandes bandejas o fuentes, y los comensales se servían ellos mismos. No existía un énfasis particular en la presentación individual de los platos.
En las décadas de 1960 y 1970 aparece en Francia una corriente culinaria que conocemos como la Nouvelle Cuisine, con la cual el emplataje comenzó a adquirir un papel protagónico, entonces se prestó más atención a la presentación y al aspecto visual de los platos. Chefs como Paul Bocuse y Michel Guérard promovieron la idea de que la comida debía ser visualmente atractiva, ligera y con un enfoque en la calidad y la frescura de los ingredientes, además de su sabor.
Actualmente los chefs utilizan diversas técnicas de emplatado para destacar los elementos de un plato, como la disposición estratégica de los ingredientes, el uso de alturas, la aplicación de salsas en patrones artísticos y la incorporación de elementos decorativos comestibles.
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El emplatado también debe ser funcional, facilitando el consumo y asegurando que cada bocado sea equilibrado en sabor y textura. Además, la elección del plato o recipiente adecuado es esencial, ya que este actúa como un marco que complementa la obra culinaria.
Algunas de las técnicas de emplatado que existen son:
Plating Asimétrico
Consiste en colocar los elementos del plato de manera asimétrica, creando un diseño dinámico y visualmente interesante. Este estilo rompe con la simetría clásica y genera un sentido de movimiento en la presentación.
Emplatado en Capas
Se colocan los ingredientes en capas verticales, utilizando alturas diferentes para dar dimensión y profundidad al plato.
Plating Circular
Los ingredientes se disponen en un patrón circular, con el elemento principal en el centro o distribuido en un círculo.
Emplatado Lineal
Los elementos del plato se alinean en una línea recta o curva, creando una presentación ordenada y minimalista.
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