Sabores de Seúl a 10 mil pies de altura

Desde su infancia en la apacible ciudad de Gimcheon, en Corea del Sur, la vida de Minae Seo ha girado en torno a los sabores. Rodeada de los aromas de la cocina tradicional y de la delicadeza con la que su madre presentaba cada platillo, su vocación culinaria se gestó de forma natural. Hoy, su propuesta trasciende fronteras—y altitudes—al conquistar el cielo en la ruta Ciudad de México–Seúl.

Parrilladas coreanas con carne Wagyú certificada en CDMX

La identidad gastronómica de Minae se consolidó en la capital mexicana con Kasina Café, un espacio donde fusiona técnicas ancestrales con sensibilidad contemporánea. Ahora, su visión viaja a más de 10 mil pies de altura como parte del menú exclusivo de Premier One, la clase ejecutiva de la ruta México–Seúl, en colaboración con Aeroméxico.

Antes de aterrizar en la vibrante metrópolis asiática, los pasajeros pueden disfrutar de una experiencia culinaria pensada para reconfortar cuerpo y alma durante las largas horas de vuelo. La chef propone un menú inspirado en las raíces de su país, diseñado para mostrar la riqueza de ingredientes y tradiciones de la cocina coreana.

Menú a bordo

La propuesta culinaria incluye dos opciones principales que rotarán cada trimestre, garantizando una experiencia única en cada viaje. Este enfoque permite explorar la amplitud de sabores que caracterizan a la península coreana.

Jowong, una nueva joya culinaria que une los sabores de Corea y México

Bibimbap – el clásico arroz mezclado – servido con vegetales frescos, huevo y bajirak muchim (guiso de almejas), que aporta un toque marino sutil y delicado.
Barbacoa coreana – jugosa carne de res marinada al estilo tradicional, acompañada de arroz coreano, bok choy (col), zanahoria, huevo, chile y un toque de ajonjolí negro.
Cheesecake de ajonjolí negro – acompañado de frambuesas frescas, chocolate oscuro y hojas de menta.
Bulgogi con arroz – otra joya coreana: tiras de carne marinada, arroz al vapor, huevo y un toque de gochugaru (chile rojo coreano), coronado con ajonjolí blanco.

Cada plato ha sido concebido por la especialista coreana para satisfacer el apetito y para ofrecer una probadita del universo culinario coreano desde el Boeing 787-8 Dreamliner de la compañía aérea, llevando a los pasajeros por un viaje sensorial inmersivo antes de tocar tierra.