- 1¾ tazas de harina 00 (aprox. 200 gramos)
- 1 cucharada de sal kosher, y un poco más para sazonar
- 4 yemas de huevo grandes
- 1 huevo grande
- 5½ cucharadas y 1 cucharadita de aceite de oliva extra virgen, a utilizar por partes
- 500 gramos de setas variadas, cortadas en trozos del tamaño de un bocado
- Pimienta negra
- 500 gramos de espárragos limpiados y cortados en trozos de 2.5 cm
- ½ cucharadita de cayena machacada
- 1/3 de taza de vino blanco seco
- ¼ de taza de crema espesa
- 1 cucharada de jugo fresco de limón amarillo
- Queso ricotta salata rallado, para servir
Ingredientes
- Coloca la harina y 1 cucharada de sal en un procesador de alimentos y procesa hasta que se combinen. Bate las yemas de huevo, el huevo entero y 1½ cucharadas de aceite en un tazón mediano. Añade la mezcla de huevo al procesador de alimentos y procesa hasta que la masa se una. Si la masa está muy seca o no logra unirse, agrégale agua gradualmente, 1 cucharada a la vez. Coloca la masa en una superficie de trabajo ligeramente enharinada y amasa hasta que quede muy suave (de 5 a 10 minutos). Cubre la masa con envoltura de plástico y déjala reposar a temperatura ambiente durante 1 hora
- Pellizca un trozo de masa de 1.25 cm, y enróllalo entre tus manos para formar una delgada cuerda de 5 a 8 cm de larga; colócala en una bandeja para hornear. Repite el proceso con lo que queda de masa. *Ver nota la final de la página
- Pon a hervir agua con sal en una cacerola grande. Cocina la pasta hasta que esté al dente (unos 7 minutos). Escúrrela, reservando ½ taza del líquido de cocción. En un tazón, revuelve la pasta con 1 cucharadita de aceite para impedir que se pegue. Limpia la cacerola con papel de cocina
- Añade el restante ¼ de taza de aceite a la cacerola y calienta a fuego medio-alto. Añade los champiñones a la cacerola y sazónalos al gusto con sal y pimienta negra. Cocínalos, revolviendo ocasionalmente, hasta que estén tiernos y ligeramente dorados (unos 8 minutos). Añade los espárragos y la cayena machacada y cocina, revolviendo, hasta que queden tiernos pero firmes (de 2 a 3 minutos). Añade el vino y cocina, raspando de la cacerola cualquier trozo ligeramente quemado, hasta que el líquido se haya absorbido (unos 2 minutos)
- Añade a la cacerola la pasta, la crema espesa, el jugo de limón amarillo y la ½ taza del líquido de cocción reservado. Reduce el fuego a medio y cocina removiendo hasta que la pasta se haya cubierto ligeramente (unos 2 minutos). Sazona al gusto con sal y pimienta negra. Coloca la pasta a 6 tazones poco profundos y sírvela inmediatamente con queso ricotta salata rallado