¿Cómo hacer tortillas de maíz en casa?

Para las tortillas hechas a mano, se requiere paciencia y práctica, así que no te agobies si no te salen a la primera.
tortillas de nixtamal

Según datos del CONACYT se estima que el 94% de la población mexicana consume tortillas de maíz de manera regular. Así que, si es parte tan importante de nuestra alimentación ¿por qué no hacerlas en casa?

El primer paso es conseguir masa nixtamalizada (unos 500 grs)y de maíz no transgénico. Puedes hacerlo en lugares especializados en el tema como Expendio de Maíz o Maizajo. Puede ser roja, amarilla, blanca o azul.

Una vez que tengas la masa de maíz es súper importante que la hidrates con agua. Por cada kilo utiliza aproximadamente 1/4 de taza de agua y amasa sobre una mesa o bowl. Al tacto, como diría mi tía Balbina, debe estar blandita, suave y manejable, que no se desmorone.

Descarga nuestro especial de verano: aquí

Una vez que esté hidratada, tápala con trapo limpio húmedo. Divide, poco a poco la masa, para formar bolitas del tamaño de una pelota de ping pong. Después puedes hacerlas a mano (tortear) o en una prensa de metal o madera.

Hacer las tortillas a mano requiere paciencia y práctica, así que no te agobies si no te salen a la primera. Con tus dos manos aplana un poco la bolita y con la parte superior de tu mano (palma superior y dedos) empieza a darle forma y voltearla hasta que este completamente plana. Si se rompe un poco puedes pellizcar y juntar la parte que se rasgó.

Para hacer las tortillas con una prensa: coloca la máquina de forma horizontal (con la palanca volteando al lado derecho). Coloca un plástico —puede ser film o una bolsa— sobre la prensa abierta, luego una bolita de masa y un plástico del mismo tamaño, cierra la prensa y presiona para aplanar la bolita. Cuida que no sea con demasiada fuerza para evitar que la masa quede pegada al plástico. Abre y retira el plástico de arriba y con el plástico de abajo desliza sobre tus manos la tortilla.

Luego coloca en un comal caliente y deja cocer hasta que se forme una ligera piel y motitas cafés, voltea y deja que infle —esto pasará por la salida de la humedad restante en la masa—. Si la tortilla no se infla, golpea ligeramente la superficie de la tortilla con los dedos en la última vuelta. Sirve de inmediato.